He comprobado empíricamente que la amistad entre un hombre y una mujer es difícil de llevar, desgraciadamente, no por mi parte...
Estoy algo desilusionada, pues de alguna manera siento que han jugado con mi confianza y con mi capacidad de sentir empatía. No me parece justo simular una actitud para conseguir algo, fingir sentimientos fraternales para llegar a un fin y cuando éste no es posible de concretar, cuando no existe reciprocidad, optar por un trato hostil hacia el ser «deseado».
He ahí el punto. No me ofende el hecho de gustarle a una persona que considero como amigo, sino el ser reducida a un objeto, el cual debe ser alcanzado sin importar la forma, sin escatimar en tiempo o dinero, mucho menos en palabras.
...Sé que no soy gran cosa, sé que más bien soy un ente vacío y despreciable... Pero el hecho de haber devenido insecto, ¿hace que deba estar subyugada a los anhelos amorosos de alguien por quien no siento más que amistad? He estado gran parte de mi vida recogiendo las migas que ésta me ofrece, aceptando todo, sin siquiera consultar a mis sentimientos qué opinan al respecto,
supongo que por ser consciente de que no tengo derecho a aspirar.
Hace un año, quizá menos, decidí que no debía seguir sucediendo...
Y acá están los resultados: más sola que un dedo, con más dolores que amistades.
